Mensaje del Director Ejecutivo: El racismo contribuye a nuestra crisis de salud pública
Estimados beneficiarios, compañeros, y amigos,
A medida que las comunidades de todo el país toman la calle y arriesgan sus vidas para exigir justicia, el Distrito y la Fundación para la Salud del Desierto se solidarizan con los manifestantes y expresa su repudio contra el racismo, la opresión y la desigualdad en todas sus formas, porque creemos que la inequidad y las desigualdades sociales tienen consecuencias, tanto visibles como invisibles.
Las muertes de estadounidenses negros en manos de las fuerzas del orden y el ataque racial a transeúntes inocentes son tragedias visibles. Estos incidentes no son individuales ni aislados. Estos sucesos ilustran las barreras sistémicas históricas, persistentes y a veces ocultas a la equidad y la oportunidad a las que se enfrentan los estadounidenses negros, y los miembros de otras minorías raciales.
Algunos van a decir que nuestro enfoque es la atención médica. Es en este contexto que reconocemos que el asesinato de estadounidenses negros en este país es, y durante demasiado tiempo has sido, una crisis de salud pública. Es una crisis arraigada en las tradiciones tóxicas del racismo sistemático y la supremacía blanca. George Floyd, Breonna Taylor, Ahmaud Arbery, y muchos más han muerto a manos de policías y vigilantes, hoy todos deberían estar vivos. Por esto, condenamos el racismo, la intolerancia y la supremacía blanca. Nadie debe tener que temer por sus vidas debido al color de su piel, origen étnico o identidad. Ningún padre debe preocuparse por la seguridad y el bienestar de sus hijos cuando salen a la calle. Ninguna comunidad debe soportar desproporcionadamente la carga de los desafíos sociales, económicos y de salud, y sin embargo los estudios muestran que la salud general de las personas de color es inferior a la salud general de las personas anglosajonas. Los negros en Estados Unidos se ven afectados por una mayor incidencia de hipertensión, diabetes, varios tipos de cáncer y COVID-19. El estrés e frecuentemente uno de los factores que contribuye a esta desigualdad. Hay pocas experiencias más estresantes que la discriminación institucional y el abuso de la policía. Este es un momento que exige empatía, que nos exige escuchar y que necesita nuestra profunda reflexión.
El Distrito y la Fundación para la Salud del Desierto está dedicado a lograr una salud óptima en todas las etapas de la vida para todos los residentes del Valle de Coachella. No podemos cumplir esta misión sin prestar mucha atención a la diversidad, la equidad y la inclusión en nuestro trabajo y dentro de la cultura de nuestra organización. Para progresar, tenemos que cambiar las condiciones que mantienen este problema en su lugar. Y hacer esto significa construir un sistema de salud que se centre en la equidad y la inclusión, un sistema de salud que se centre en las necesidades de todos nuestros residentes, incluyendo -y especialmente, las necesidades de nuestras comunidades de color.
Estamos comprometidos a escuchar atentamente a nuestros muchos socios, especialmente a aquellas personas y organizaciones con relaciones de confianza en las comunidades de color, con respecto a las inequidades y a las barreras a las oportunidades, para que el Distrito fortalezca los activos de la comunidad y avancemos estrategias compartidas. Nuestro trabajo conjunto nunca ha sido más importante. Podemos y debemos hacer más para levantarnos, hablar y estar con aquellos que comparten nuestro compromiso con la justicia social.
Conrado E. Bárzaga, MD
CEO del Distrito y la Fundación de Salud del Desierto